¿Son productivas tus crisis? En ciertos contextos se tiende a considerar siempre a las crisis después de la terapia como "crisis curativas". ¿Pero realmente esto es verdad?. ¿Son necesarias siempre? Mi experiencia tanto personal como profesional me dice que no es así. Es verdad que hay veces que para que la persona cambie es necesario que atraviese momentos de dificultad, pero esto no es lo habitual y cuando se da, el terapeuta, después de haber creado un clima de total confianza, lo decide previa y conscientemente, procurando un apoyo y cuidado exquisitos durante el proceso.
Las crisis que la vida nos pone normalmente son las necesarias para completarnos en nuestro proceso de desarrollo y aprendizaje; es el transcurso natural de los acontecimientos el que decide si hemos o no de sufrir más para seguir evolucionando. Además la vida suele ser muy tozuda, en el sentido que nos repite las mismas situaciones una y otra vez hasta la saciedad para que demos el cambio. Frecuentemente es aquí donde el profesional ha de dar un empujoncito, siempre con cuidado de no empujar más de lo necesario, y apoyar en el proceso para sacar el máximo provecho y el máximo aprendizaje de la situación.
También es cierto, como decía Albert Einstein, que en esos momentos difíciles es donde se producen los grandes amaneceres. La "noche oscura" en palabras de Juan de la Cruz, es inherente en este camino para el despertar, pero precisamente por eso es tan importante saber que en esos momentos oscuros, detrás de los nubarrones siempre está el cielo azul, esa conciencia indestructible que nos apoya, nos anima y nos da alas para mantenernos en el proceso.
En el último taller que hicimos en ERES y titulamos "iluminando la sombra", la sincronicidad se encargó de que no pudiéramos oír la canción "aunque es de noche" (también de Juan de la Cruz) que tan admirablemente han versionado ahora Rosalía y en su momento Enrique Llorente. Como en todo lo que nos ocurre se esconde esa parte de oportunidad y aprendizaje, esta circunstancia nos ha dado la oportunidad de darle más relevancia a estas estrofas que tan esperanzadamente te recuerdan en los momentos de sufrimiento que aunque es de noche, el sol nunca desaparece.
Aunque Es De Noche
Qué bien sé yo la fuente que mana y corre
Aunque es de noche
Aquella eterna fuente está escondida
Qué bien sé yo donde tiene su manida
Aunque es de noche
Su origen no lo sé, pues no lo tiene
Mas sé que todo origen de ella viene
Aunque es de noche
Sé que no puede haber cosa tan bella
Y que cielos y tierra beben de ella
Aunque es de noche
Bien sé que suelo en ella no se halla
Y que ninguno puede vadearla
Aunque es de noche
Su claridad nunca es oscurecida
Y toda luz de ella es venida
Aunque es de noche
Y son tan caudalosas sus corrientes
Que cielos, infiernos riegan y la gente
Aunque es de noche